Ernesto Figueroa Rubio, responsable de Gefigal Asesores

Al frente de un despacho colegiado en A Coruña, este joven gestor administrativo afirma que la profesión tiene un gran futuro y que es imprescindible el soporte colegial para mejorar y ser más competitivos

Jueves 9 de noviembre de 2017

¿Qué balance haces de estos años de ejercicio profesional?
Muy positivo. El avance en los dos últimos años ha sido espectacular, creciendo en facturación y por tanto, en responsabilidad. La plantilla media, incluyendo a los dos socios, ha pasado de tener tres trabajadores, a la actual de 5 empleados con vista a contratar una persona más.

¿Fueron difíciles los comienzos? 
Todos los inicios son complicados. En un principio comenzamos sin el apoyo corporativo, pero, al poco de crecer, nos dimos cuenta de que un soporte colegial en una actividad como la nuestra es imprescindible.

¿Qué cambios ha sufrido la profesión desde que empezaste hasta ahora? La evolución es favorable?
La resumo en pocas palabras: formación y reciclaje, constancia y esfuerzo. Nuestra profesión requiere de una continua adaptación a las variaciones legislativas. Siguiendo ese patrón puedes ofrecer al cliente lo que necesite. Y por supuesto, la evolución es favorable porque tenemos una fortaleza, que es la confianza que nuestros clientes depositan en nosotros. La confianza es un activo intangible que no está suficientemente valorado.

Qué tipo de clientes tienes? Cuáles son los problemas que más les preocupan? Nuestra G.A. principalmente  presta servicios a empresas. Salvo en ciertos periodos, donde también los particulares solicitan nuestros servicios, como en Renta.

¿Algún logro profesional que ponga de manifiesto la importancia del trabajo desarrollado por los gestores administrativos?
Más de uno. En nuestra profesión no existe la monotonía. Siempre aparecen casos nuevos, y casi siempre más complejos que el anterior que hacen que crezcamos como profesionales.

Crees que la sociedad conoce la profesión? Está suficientemente valorada? Que se podría hacer al respecto?
Nuestra labor no se conoce con la profundidad que a todos los colegiados nos gustaría. Hay profesiones del mismo sector que están más valoradas que la nuestra, como la abogacía o la notaría. Como solución al problema, es imprescindible informar al mercado de nuestras actividades y responsabilidades.

Existe el intrusismo profesional?
En el mercado de servicios es un mal común. Lo peor de esto es que hay trabajadores que no están lo suficientemente formados o realizan una mala praxis y esto nos acaba perjudicando porque hay sectores de la sociedad que no saben distinguir entre estos despachos y una gestoría administrativa.

Posibilidades de diversificación o nichos de mercado donde se pueda crecer como profesional.
Una profesión como la de gestor administrativo destaca por ser polivalente. En otros sectores laborales los profesionales se especializan en un área concreta, como los farmacéuticos o los economistas. En mi opinión, lo que caracteriza a un gestor administrativo es su facilidad para adaptarse a cualquier tipo de actividad empresarial y ahí radica su fortaleza.

Cómo crees que van a ser las gestorías administrativas en el futuro? Se están adaptando a la transformación digital?
La transformación digital nos puede ayudar en mecanizar ciertos procesos de nuestra actividad, aumentando nuestra productividad. Yo creo que cada vez trabajaremos a través de Internet y que se incrementarán los servicios online en detrimento de los presenciales.  

Qué crees que hay que reforzar para transmitir el valor de la profesión?
Es imprescindible que nuestros clientes perciban que nuestros servicios administrativos tienen un valor añadido y que ello es garantía de rentabilidad.